La almohada puede influir en la salud de su columna, cabeza y cuello

Incrementa la creatividad, aumenta la memoria, reduce la depresión y mejora la salud al ayudar al sistema inmunitario a regenerarse, estas son solo algunas de las ventajas que produce el descanso a través del sueño.

Los complementos que utilizamos para hacer este momento más placentero, tales como el colchón, sábanas y almohadas, son importantes; tomando en cuenta que pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo; pues al despertar la mala elección puede manifestarse a través de dolor.

El fisioterapeuta, especialista en ortopedia de la Caja de Seguro Social (CSS), Josip Espinosa, explicó que si bien es cierto la almohada ofrece comodidad, también aporta apoyo a nuestro cuerpo.

Indicó que es importante conocer los puntos que pueden verse comprometidos de no usarse de forma correcta, que pertenecen a la columna vertebral, como lo son la zona cervical, torácica, lumbar y pélvica; las cuales tienen su curvatura, que debe ser respetada, para evitar que la espalda, hombro  y cuello se resientan.

Explicó que dependiendo del modo en que se duerma, en esa misma forma debe utilizarse esta bolsa rellena de material por lo general blando.

​Precisó que, si se usa de modo lateral, la almohada debe estar a la altura del hombro para mantener la rectitud de la columna y usar otra, en caso de ser necesario, entre las rodillas, para prevenir el descenso y aducción de la cadera.

Hay quienes dormitan boca abajo.  Sobre esta posición sentenció que no es recomendable ya que el cuello esta una posición forzada en rotación y puede aumentar la curvatura lumbar.

En el caso de dormir boca arriba, la almohada debe estar reposando desde la base del cuello hasta la cabeza, para que permanezca la curvatura normal. También en esta posición se puede colocar otra almohada debajo de las rodillas -siempre y cuando tengamos los músculos de la parte baja de la espalda bien tonificados- puesto que ayudaría a estirar la espalda.

El fisioterapeuta subrayó que este accesorio, con el tiempo, va perdiendo su consistencia, por lo que es importante que una vez sienta que no tiene la solidez necesaria debe reemplazarla, y de esta manera cuidará la salud de su cuerpo, que no se verá comprometida al permitir que los músculos se relajen.

De ser posible, agregó, cuando escoja la nueva almohada intente probar los modelos, adoptando la postura en la que duerme habitualmente, y así podrá tener mayor certeza de que la cabeza, el cuello, hombros y la columna estarán bien alineados.​

Nota: Diamar Díaz Nieto