Dormir lo suficiente facilita el aprendizaje de los estudiantes

Tanto el cuerpo como la mente necesitan de un descanso reparador para el día siguiente tener la suficiente energía, concentración, atención y memoria, para poder rendir lo suficiente y en el caso de Madeline (pidió reserva de su apellido), joven que cursará el XI grado, el aprendizaje mejoró notablemente cuando modificó su forma de tomar la siesta luego de su jornada educativa.

Ella acostumbrada desde guardería dormir bastante, desde su ingreso al colegio tuvo inconvenientes en cuanto al horario escolar por el sueño que padecía, perjudicando su rendimiento.

Su madre al notar que continuaba con la misma rutina que le perjudicaba, poco a poco con mucha dificultad, logró cambiar esta situación, instándola a tomar la siesta en menor tiempo, con lo que logró mejor sus calificaciones.

Opinión clínica

“El descanso y dormir bien, son de vital importancia para el aprendizaje, ya que es durante estas horas, el cerebro procesa toda la información que ha adquirido durante el día, sino se duermen las horas suficientes, no va a tener la capacidad de gestionar y funcionar bien durante el día”, indicó la Lcda.  Soledad Sierra Duque, psicóloga de la Policlínica “Dr. Miguel Cárdenas Barahona”.

Las personas pueden tomar una siesta (1 hr), sin que esta perjudique sus horas de dormir en el horario nocturno…

Soledad Sierra, psicóloga

Señaló que los estudiantes de Educación Básica deben dormir, al menos entre 9 y diez horas seguidas de noche, cuando tiene 12 años, lo recomendable sería entre 8-9 y de que 14 en adelante, unas 8.

La siesta, como opción  

“Los niños en etapa preescolar si duermen en la tarde, deben hacerlo por espacio de una hora”, destacó la Lcda. Sierra”

Una siesta de más de una hora no es lo más apropiado durante el día, ya que se le puede restar tiempo de calidad al sueño, afectando el ciclo de este, agregó la psicóloga clínica, al aclarar que “un estudiante que llega a las 3:00 de la tarde, duerme hasta las 6:00, luego acostarse entre las 10 y 11 de la noche,  afecta su rutina de sueño”.

Nota: Yovira Walcott Muñoz

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