Esclerosis sistémica, enfermedad discapacitante

“Sufro mucho, mis tratamientos están siendo más agresivos. Actualmente recibo quimioterapia; sin embargo, la enfermedad no me ha dado tregua”. es el testimonio de Justina Pérez una joven diagnosticada con esclerosis sistémica a una edad temprana.

Caso clínico de la enfermedad

El Dr. Francisco Urriola, médico general en la Unidad Local de Atención Primaria (Ulaps) Sra. Lastenia Canto Solís, ubicada en el distrito de Capira, explicó que, en el caso de la Sra. Justina, este tipo de esclerosis sistémica o esclerodermia es una de las condiciones más severas de la enfermedad. «Es poco frecuente (existen diferentes variantes de este padecimiento), progresiva y autoinmune, atacando la dermis y el tejido conjuntivo» explicó el galeno.

Con la esclerosis sistémica, generalmente, los órganos internos van endurecimiento, al igual que en la piel.

El Dr. Urriola indicó que este padecimiento puede aparecer a cualquier edad, pero se presenta con mayor frecuencia en mujeres y adultos de 25 años en adelante. “El pronóstico varía enormemente, dependiendo del paciente”, añadió.

Expresó que la esclerosis sistémica puede ser leve, manifestándose únicamente en la piel, o abarcar muchos otros órganos, evolucionando con el paso de los años, como es el caso de la Sra. Pérez. A su vez, mencionó que los pacientes suelen tener diagnósticos de otras enfermedades reumáticas autoinmunes, como el lupus y la hipertensión pulmonar, entre otros.

“Para la esclerosis sistémica no hay un tratamiento específico; no obstante, se ofrecen terapias que ayudan a mejorar la calidad de vida de los pacientes”.

Ver la vida con otros ojos

Para Justina O. Pérez, la vida continúa siendo difícil, pero la enfrenta con optimismo. “Mi pronóstico de vida nunca ha sido bueno; sin embargo, he logrado sobrevivir. Tuve a mi hija y, a pesar de todo mi sufrimiento, creo que Dios tiene un propósito para mí”.

Nota: Edda Garibaldi