Cómo controlar y vencer el trastorno de ansiedad
La ansiedad ocasional es una parte normal de la vida. Sin embargo, las personas con trastornos de ansiedad suelen experimentar preocupaciones y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones cotidianas, explicó la Dra. Karen Buitrago, psiquiatra de la Policlínica “Don Generoso Guardia” de la Caja de Seguro Social (CSS), en Santa Librada.
La Dra. Buitrago informó que los trastornos de ansiedad se caracterizan por episodios repetidos de sentimientos repentinos de ansiedad intensa, miedo o terror, que alcanzan su punto máximo en cuestión de minutos. Estos sentimientos de ansiedad y pánico interfieren con las actividades diarias, son difíciles de controlar y desproporcionados en comparación con el peligro real, pudiendo durar un largo tiempo.
Mencionó que la ansiedad se manifiesta como una sensación de incomodidad, preocupación y nerviosismo, además de síntomas físicos de estrés. Estos síntomas suelen presentarse cuando una persona teme a un peligro inmediato, pánico o catástrofe, e incluyen aumento del ritmo cardíaco, respiración acelerada, sudoración, temblores, sensación de debilidad o cansancio, y problemas para conciliar el sueño, entre otros.
“No está del todo claro cuáles son las causas de los trastornos de ansiedad; sin embargo, ciertas experiencias de vida, como acontecimientos traumáticos, y rasgos heredados parecen contribuir a su aparición en personas predispuestas a la ansiedad”, destacó la Dra. Buitrago.
Explicó que los trastornos de ansiedad incluyen: el trastorno de ansiedad generalizada, fobias específicas, ataques de pánico, ansiedad por separación, trastorno de ansiedad social y agorafobia (miedo a lugares y situaciones donde las personas pueden sentirse atrapadas).
Señaló que no es posible prever con certeza qué causa que una persona desarrolle un trastorno de ansiedad. Por ello, recomendó algunas medidas para combatir el impacto de los síntomas de ansiedad: detener los pensamientos negativos, utilizar frases tranquilizadoras, buscar un lugar que lo calme, controlar la respiración, limitar el uso de alcohol y cafeína, cultivar una actitud positiva, realizar actividad física, dormir lo suficiente y buscar ayuda profesional, visitando al psiquiatra sin estigmas.
Nota y Fotos: Diana del Rosario Pineda A.