Piercings: estilo con implicaciones peligrosas para la salud
A lo largo de la historia de diferentes culturas, los “piercings” involucraron algún significado. En ciertos lugares, estas perforaciones, hechas en cualquier zona del cuerpo, era sinónimo de virilidad, estatus, rebeldía o constituía el anuncio del cambio de etapa en la vida de un individuo, etc. A pesar de ser parte fundamental en muchas sociedades, estas perforaciones pueden traer consigo una serie de riesgos para la salud.
El piercing en la lengua puede producir infecciones orales, si no se realiza el procedimiento con la higiene adecuada, este músculo posee infinidad de vasos sanguíneos grandes. Por consiguiente, las complicaciones sistémicas a raíz de una perforación son tan graves que una persona puede llegar a padecer de endocarditis bacteriana, que es una infección en el corazón, expresó el Dr. Julio Medina, odontólogo en la Unidad Local de Atención Primaria de Salud, ULAPS de San José, en el distrito de San Carlos.
Por otro lado, indicó que ciertas perforaciones en la boca provocan parestesia que es el adormecimiento o la pérdida de sensibilidad en la zona afectada, esto como consecuencia del desgarre o pinchazo que sufren los nervios. Asimismo, aparece el mal aliento, porque al inflamarse el área donde está el orificio hay dolor y la persona no lleva a cabo una buena limpieza bucal, acumulándose restos de alimentos y bacterias.
«Entre otros peligros que acarrea la práctica de colocarse “piercings” en la boca están las fracturas dentales y las lesiones periodontales, ya que las encías sufren desplazamientos porque hay pérdida de encía. Se recomienda -agrega el Dr. Medina- no hacerse perforaciones en los alrededores de la boca por todo lo que encierra; además, se debe considerar que estos “piercings” son colocados en “tatoos estudios”, por personas que casi no tienen o carecen completamente de conocimientos en anatomía.
Nota de prensa: Edda Nereira