Factores que determinan la producción de cálculos biliares

Existen algunos factores, sobre todo alimenticios, que producen cálculos o litiasis biliar, mejor conocidos como piedra en la vesícula; la obesidad es uno de ellos, ya que este se relaciona con niveles altos de colesterol en la bilis.

El Dr. Ángel Madrid, médico general de la Policlínica Don Alejandro de la Guardia, Hijo, añadió que el sexo femenino, por el aumento de estrógenos, también aumenta el colesterol en la bilis, al igual que las personas que consumen alimentos altos en grasa, con carbohidratos refinados y bajos en fibra; en ocasiones, también, puede haber una historia familiar con predisposición genética.

El doctor Madrid explicó que los cálculos se pueden formar de 3 tipos:

Los cálculos pigmentarios: que son compuestos de bilirrubina y calcio, que son frecuentes en personas con enfermedades hepáticas o infecciones biliares.

Cálculo de colesterol: este diagnóstico es el más común, formados casualmente por exceso de colesterol.

El cálculo mixto: que no es más que la combinación de colesterol, bilirrubina (sustancia amarilla-amarronada que se produce cuando el cuerpo descompone los glóbulos rojos viejos) y sales de calcio.

Este desequilibrio en la composición de la bilis, sustancia producida por el hígado y almacenada en la vesícula, ayuda a la descomposición de la grasa, puede llevar la cristalización de ciertos componentes.

Añadió que, normalmente, la bilis contiene suficiente cantidad de sales biliares y lecitina para mantener el colesterol disuelto, pero si hay exceso de este (hipersecreción hepática) o una insuficiencia de sales biliares, el colesterol se puede cristalizar y formar cálculos.

«En los últimos años se ha visto un aumento de casos con diagnóstico de cálculos en la vesícula, y no solo en personas mayores de 40 años, como hace 30 o 40 años atrás; esto se traduce en que, actualmente, la forma de alimentarnos ha cambiado desfavorablemente», recalcó el profesional.

Para evitar la formación de piedra en este órgano se pueden tomar algunas medidas, por ejemplo, comer menos carbohidratos refinados y menos azúcar; comer grasas saludables como el aceite de pescado y de oliva, así la vesícula se contrae y se vacía con regularidad; comer alimentos con alto contenido de fibra, tomar suficiente agua y evitar las gaseosas. «Definitivamente, debemos llevar un estilo de vida saludable», concluyó el Dr. Madrid.

Nota y fotos: Giovanna Rodríguez Cáceres