¿Por qué mi hijo no crece? Descubre las claves detrás de la talla baja infantil

La talla baja en niños es una de las principales inquietudes de los padres durante las consultas pediátricas. Según el Dr. José Grimaldo, endocrinólogo pediatra del Hospital Pediátrico de Alta Complejidad de la Ciudad de la Salud, esta condición puede tener causas genéticas, hormonales o ambientales que afectan el desarrollo desde etapas prenatales.

La evaluación inicial de la talla baja comienza con un análisis detallado del crecimiento del niño, utilizando gráficas de crecimiento de la Organización Mundial de la Salud (OMS), herramientas clave para monitorear y comparar el desarrollo.

«Medimos la talla con instrumentos precisos y personal capacitado para identificar si se trata de una talla patológica, como la derivada de enfermedades sistémicas, o no patológica, como la talla baja familiar o el retraso constitucional del crecimiento», señala el Dr. Grimaldo. Además, el especialista explica que la velocidad de crecimiento, medida en centímetros por año, es un indicador esencial de salud, ya que valores normales suelen descartar afecciones graves.

En cuanto al diagnóstico, el Dr. Grimaldo subraya la importancia de realizar un examen físico completo, acompañado de pruebas de laboratorio, estudios de imágenes y una radiografía de maduración ósea. Estos procedimientos permiten detectar posibles causas primarias, como deficiencias hormonales, o secundarias, como la desnutrición o enfermedades crónicas.

“Una talla baja asociada a bajo peso puede indicar afecciones orgánicas como cardiopatías o enfermedad celíaca, mientras que una baja estatura con aumento de peso puede sugerir problemas endocrinos, como hipotiroidismo o deficiencia de la hormona de crecimiento”, explica.

El tratamiento depende directamente de la causa identificada. Para casos de desnutrición, se establece un plan de alimentación específico que requiere seguimiento constante. En pacientes con deficiencia de hormona de crecimiento, se administra esta hormona de manera inyectable bajo estricta supervisión médica en el primer piso de la Consulta Externa del Hospital Pediátrico de Alta Complejidad. Asimismo, el hipotiroidismo relacionado con talla baja se corrige con terapia oral de hormona tiroidea.

}»El seguimiento es crucial, y los padres deben cumplir rigurosamente con las citas de crecimiento y desarrollo para detectar posibles anomalías a tiempo», añade el especialista.

El Dr. Grimaldo finaliza destacando la relevancia de estas consultas programadas desde el nacimiento, no solo para identificar problemas de crecimiento, sino también para prevenir enfermedades asociadas. La colaboración entre pediatras, endocrinólogos y familias asegura un manejo integral, brindando a los niños la mejor oportunidad de alcanzar su potencial de crecimiento y desarrollo.

Nota de prensa y fotos: Blanca Peralta de Farrugia