Hemodiálisis: un tratamiento de vida

La enfermedad renal crónica es una afección en la cual los riñones sufren daño permanente.

La función de este importante órgano disminuye y empeora con el tiempo.

En los últimos 20 años se ha detectado a nivel mundial un incremento de casos entre la población infantil.

En el Hospital de Especialidades Pediátricas «Omar Torrijos Herrera”, muchos niños que presentan esta condición, acuden tres veces a la semana a la sala de hemodiálisis, donde por tres horas deben someterse a sus respectivos tratamientos.

¿Qué es la hemodiálisis y para qué sirve?

La hemodiálisis es un tratamiento que permite filtrar las toxinas, sales y líquidos de la sangre, tal y como lo hacían los riñones cuando estaban sanos.

El tratamiento ayuda a controlar la presión arterial y a equilibrar los minerales importantes en la sangre como el potasio, el sodio y el calcio.

“La insuficiencia renal crónica, se diagnostica de varias maneras. Algunos problemas del niño se identifican antes del nacimiento por medio de un ultrasonido. Por lo general , existen otras preocupaciones sobre la salud del niño que conducen al diagnóstico”, dijo el Dr. Basilio Dobras, nefrólogo pediátrico.

¿Qué causa la insuficiencia renal crónica en los niños?

En los bebés y en los niños esta condición la causan defectos de nacimiento,  malformaciones congénitas y enfermedades hereditarias como la enfermedad poliquística del riñón.

Así también, infecciones en las vías urinarias que deben ser tratadas con prontitud, ya que pueden causar una enfermedad renal.  Otras afecciones que pueden dañar los riñones son: el síndrome nefrítico o las enfermedades que afectan varios órganos como el lupus.

El doctor Dobras explica que, en Panamá, las malformaciones congénitas y los problemas de nacimiento, son la causa más común entre los niños que presentan esta condición.

“Lo importante y la clave está en prevenir el daño renal ya que se puede detectar a tiempo. Las malformaciones pueden verse en el embarazo”, agregó.

Síntomas

Según el nefrólogo, si un niño no crece, no se desarrolla adecuadamente, presenta hinchazón persistente, una orina oscura o color chocolate o tiene problemas de presión alta, debe ser evaluado para ser tratado adecuadamente.

Es importante identificar estos síntomas para evitar que los niños lleguen a presentar un daño renal irreversible en el futuro.

A su vez, la enfermera Yamileth Montenegro, con más de ocho años de experiencia en estos casos, sostuvo que “estos pacientes deben aprender a vivir con esta condición y someterse a la diálisis durante varias horas.  Aquí procuramos una atención de calidad y que el tiempo que pasen en la sala sea lo menos traumático posible””.

Agregó que estos casos son difíciles porque la familia debe adaptarse también al tratamiento y al estilo de vida del niño.

La hemodiálisis es un tratamiento de reemplazo, imprescindible en un gran porcentaje de niños, que logra mejorarles sustancialmente la calidad de vida y les permite enfrentarse al mundo con esperanza.

Nota: Myrna Ortega Llamas

Fotos / Videos: Melvin Zeballos