Salud mental y su importancia en la incorporación del paciente a su vida cotidiana
«Sin salud mental no hay salud», es la frase que los especialistas en psiquiatría promueven para expresar la importancia que el servicio ofrece a todos los asegurados, informó la psicóloga Yahaira Fermín, del Complejo Hospitalario «Dr. Arnulfo Arias Madrid» (CHDr.AAM).
Una pregunta que muchas personas se formulan es «¿Necesito ayuda psicológica?», la respuesta a esta interrogante se contesta cuando:
· El miedo no me deja vivir tranquilo
· Estoy insatisfecho conmigo mismo
· No me atrevo a platicar mi problema
· No supero mi rupturas de pareja
· Me desanimo frecuentemente
· Perdí el control de mis emociones
· Siento que nadie me entiende
· Mi malestar aumenta día a día
· Sufrí la pérdida de un ser querido
· No gestiono la conducta de mis hijos
· Mi relación de pareja está en crisis
Todas estas señales de alarma deben de llevar al paciente a buscar ayuda de un profesional, reveló la psicóloga Fermín.
Existen pacientes que luego de superar el virus respiratorio de la COVID-19 enfrentan problemas de salud mental al incorporarse a su vida cotidiana y laboral; además, muchos han sufrido la pérdida de un familiar, lo que les ha generado un descontrol en la salud mental.
Muchas secuelas emocionales ante el aislamiento que el paciente ha tenido que mantener para evitar el contagio en medio de esta pandemia, como medida de bioseguridad, provoca en muchos depresión, ansiedad, llantos con facilidad, desgano o abandono de su arreglo personal, entre otras situaciones, indicó la psicóloga.
Hay casos de paciente que les ha tomado meses estar sano físicamente y emocionalmente, para incorporarse a su rutina de forma gradual, de manera que inicialmente su carga laboral física y mental no se vea exacerbada.
Otro aspecto que señala la especialista, como efectos en la salud mental, es el tema relacionado al estrés que ha generado en muchos hogares la falta de trabajo de alguno de los proveedores del hogar.
Estos pacientes presentan:
· Sensación de devaluo a nivel personal (no lo podré lograr)
· Pensamientos negativos recurrentes
· Por la edad, no podré encontrar otro trabajo
· Poca concentración
· Llanto con facilidad
· Depresión
· Irritabilidad
· Humor cambiante.
Todo esto aunado a la presión familiar por los gastos y las deudas que se deben pagar.
Algunas de las recomendaciones para reducir el impacto de la falta de trabajo en un hogar son las siguientes: mantener una actitud positiva, saber que la vida continúa y mantener un equilibrio saludable entre los miembros de la familia para encontrar una solución.
Nota y fotos : Ivette De León