Labio leporino y paladar hendido: condición compleja que necesita atención
El labio leporino y paladar hendido son malformaciones congénitas que tienen su origen durante la etapa de formación embrionaria, que sucede durante la sexta y décima semana de gestación, momento en el que deben unirse los huesos del paladar y los labios. Al no producirse la unión adecuada en el desarrollo del bebé, se presenta esta anomalía.
De acuerdo al Dr. Julio Medina, odontólogo en la ULAPS de San José, en el distrito de San Carlos, el labio leporino es una hendidura que va del labio hacia las fosas nasales y puede comprometer las encías y el paladar.
El odontólogo explica que es importante la inmediatez en la atención porque, de otro modo, el infante tendrá problemas con su alimentación ya que los líquidos y los alimentos irían directo a la cavidad nasal a través del paladar, debido a que “el cielo de la boca” es el piso de las fosas nasales.
Pero existen otros factores que se ven perjudicados con este defecto, como la audición, la fonación, el habla, el aspecto estético (afecta la salida de los dientes), y puede haber problemas de conducta por la baja autoestima.
Nota: Edda Nereira
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