Alimentación sana y práctica de actividad física pilares fundamentales para una vida saludable
Sentirse y vivir bien dependen, en gran medida, del cuidado que se le dé a nuestro organismo, por lo que adoptar buenos hábitos alimenticios y la práctica de actividad física es indispensables para evitar problemas graves de salud como la obesidad y diabetes.
El Lcdo. Víctor Rojas, nutricionista y dietista en la Policlínica “Dr. Blas Daniel Gómez Chetro”, indicó que una buena alimentación se basa en una dieta saludable y equilibrada que aporte los nutrientes y energías necesarias para mantener un cuerpo sano.
Para una alimentación saludable – explicó el nutricionista – se debe respetar las tres comidas y procurar hacerlo con horas fijas, lo que contribuye a mantener un sistema inmunológico en óptimas condiciones y a prevenir padecimientos físicos.
Es muy importante que al momento de adquirir un producto se revise el etiquetado nutricional que contiene información sobre la cantidad de calorías, porciones y datos nutricionales de los alimentos, para verificar que al momento de la elección sea lo más saludable posible, resaltó.
La ingesta de comidas deben incluir variedad de alimentos ricos en nutrientes tomando en cuenta las frutas y vegetales además de las proteínas, utilizar condimentos naturales en la preparación como ají, ajo, cebolla, culantro, orégano, perejil, cebollina, apio, achote, preferir los productos lácteos bajos en grasa y evitar el exceso de sal y azúcar, recalcó. “No es necesario eliminar ciertos alimentos, simplemente es moderar su consumo” concluyó el especialista en nutrición.
Rojas indicó que la actividad física es otro pilar fundamental por sus múltiples beneficios para el corazón, el cuerpo y la mente además, de favorecer la prevención de enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, diabetes y cáncer.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) si la población fuera más activa se podrían evitar, al año, hasta 5 millones de muertes. El riesgo de muerte de quienes son insuficientemente activas es de 20 a 30% más, en comparación con aquellas que practican la actividad física.
Nota y fotos: Arleth Yanisselli