Diciembre, el mes de alto riesgo por quemaduras: aquí le decimos cómo evitarlas
Durante el mes de diciembre son muy comunes los accidentes en el hogar, que implican quemaduras, ya sea por horno o por juegos pirotécnicos, tanto en niños como en personas adultas.
Según estadísticas de la Organización Mundial de la Salud las lesiones por quemaduras suben un 40 % en las fechas de fin de año.
Las quemaduras son lesiones en los tejidos de cualquier parte del cuerpo, que pueden ser causadas por calor, sustancias, electricidad, sol o radiación, vapor o líquido caliente, y producen hinchazón, ampollas y, en los casos más graves, shock en las personas afectadas.
El Dr. Pedro Castrellón, director médico de la Unidad Local de Atención Primaria en Salud (Ulaps), ‘Sra. Lastenia Canto Solís’, en Capira, dijo que las quemaduras si no son tratadas a tiempo o de manera adecuada pueden conducir a infecciones que pueden dañar la barrera protectora de la piel.
Castrellón mencionó que hay tres tipos de quemaduras:
- Quemadura de primer grado: dañan la capa externa de la piel.
- Quemadura de segundo grado: dañan la capa externa y la que está por debajo de ella.
- Quemadura de tercer grado: dañan la capa profunda de la piel y los tejidos debajo de ella.
El tratamiento para quemaduras depende del lugar y la intensidad de la lesión, las que son ocasionas por el sol se pueden tratar en casa; las lesiones más graves o profundas se deben de tratar en instalaciones de salud, para recibir la debida atención.
Quemaduras que requieren atención médica de emergencia
- Quemaduras en manos, pies, cara, ingle, glúteos, una articulación principal o un área grande del cuerpo.
- Quemaduras profundas, quemaduras que afectan todas las capas de la piel o incluso tejidos más profundos.
- Quemaduras que hacen que la piel se vea áspera.
- Quemaduras que tienen un aspecto carbonizado o que tiene parches negros, marrones o blancos.
- Quemaduras provocadas por sustancias químicas o electricidad.
- Dificultad para respirar o quemaduras en las vías respiratorias.
Es importante que cada persona sepa qué hacer en caso de emergencia, para poder brindar primeros auxilios en caso de quemaduras, tanto leves como graves, los cuales serían:
Quemaduras graves
Evitar que la persona afectada sufra otros daños, alejando a la victima de la situación que le provocó la quemadura. En caso de quemaduras por electricidad, asegurarse de que la fuente eléctrica esté desconectada antes de acercarse a la persona quemada.
- Se debe de asegurar que la persona que tenga las lesiones este respirando, si no es así y usted sabe dar reanimación, hágalo.
- Quitar toda prenda que este en contacto con la herida, ya que las quemaduras se inflaman con rapidez.
- No sumerja una quemadura grave y extensa en agua. Esto podría causar una pérdida grave de calor corporal (hipotermia).
- Eleve la zona que presenta quemaduras. En lo posible, eleve la herida por encima del nivel del corazón.
- Preste atención a los signos de choque. Los signos y síntomas comprenden desmayos, palidez o evidente respiración poco profunda.
Quemaduras leves
- Enfríe el área colocando la quemadura bajo agua fresca o aplique compresas húmedas y frescas hasta aliviar el dolor.
- Quite joyería o artículos ajustados de la zona afectada, antes de que la zona se hinche.
- No reviente las ampollas, ya que estas brindan protección contra las infecciones, si se revienta una, limpie la zona con agua (el uso de un jabón suave es opcional). Además, puede aplicar un ungüento antibiótico, pero si aparece un sarpullido, suspenda el uso del ungüento.
- Una vez que la quemadura se haya enfriado por completo, aplique una loción, como una que contenga aloe vera o un humectante. Esto ayuda a prevenir la sequedad y brinda alivio.
- Coloque una venda sobre la quemadura, utilice una venda estéril, sin apretarla, para evitar ejercer presión sobre la piel quemada. Las vendas evitan que la zona tenga contacto con el aire, aplacando el dolor.
- Si no es alérgico a nada, puede tomar analgésicos de venta libre, como ibuprofeno, paracetamol u otros.
Nota de prensa y foto: María Palacios