Paramédicas de DENGEDTP en Coclé, enfrentan sus labores con destrezas y preparación

Las tres paramédicas del Departamento Nacional de Gestión de Emergencias, Desastres y Transporte de Pacientes (DENGEDTP) de la Caja de Seguro Social, en Coclé; coinciden en que su profesión de técnicas de Urgencias Médicas (TUM) les ha requerido? templanza, adiestramiento y actualización continuas porque de sus habilidades y conocimientos puede depender la vida de las personas.

La TUM Maricarmen Tuñon Saenz, con 9 años de ser parte de la DENGEDTP en Coclé, comentó que en su profesión ha encontrado grandes satisfacciones.

Expresó que al acudir a realizar traslados de pacientes, ya sea, en las casas o accidentes vehiculares; encuentra a las personas en situaciones difíciles muchas veces es necesario hacerles maniobra de reanimación o colocarles oxigeno hasta llegar al hospital. Al final, “lo satisfactorio es que el paciente evolucione bien y eso significa que hice bien mi trabajo”.

Añadió la paramédica que sus compañeros la apoyan en todo momento, se llevan bien. Y en su tiempo libre, comparte con su familia, por lo que valora cada momento con ellos.

Por su parte, la TUM Emileydis Del Rosario dijo que hace 18 años inició su labor de paramédica en la capital, pero luego se trasladó a laborar a la base en Aguadulce.

Del Rosario comentó que estudió Técnico en Urgencias Médicas, porque no se lleva muy bien con la rutina y en esa profesión no se sabe con qué se encontrará en un turno, se conoce la hora de entrada, pero no la de salida, ya que pueden faltar cinco minutos para salir del turno y solicitan una ambulancia.

Hay que prepararse constantemente, ser objetiva, emocionalmente estable, tener cuidado en el manejo de las personas y sentir empatía por los demás.

En la DENGEDTP de Aguadulce, laboran 10 varones y tres mujeres; destacando la necesidad de trabajar en equipo y prepararse para darlo todo; puesto que hay casos que demandan más, tanto física como técnicamente.

Durante su carrera, a Emileydis le han impactado muchos casos, sobre todo los accidentes donde hay personas atrapadas, ya que por más que se intente auxiliarlas, utilizando todos los equipos con los que se cuenta, el pronóstico no va a ser favorable.

A veces, hay circunstancias contrarias como el clima o la espera por otras instituciones para realizar la extracción. En momentos así, se siente impotencia, saber lo que se debe hacer y que sabes hacerlo, pero no puedes, sino hasta que liberen al paciente.

Los paramédicos del DENGEDTP también atienden pacientes en sus casas y hay que entender su situación, en este escenario es más difícil pues hay que tomar en cuenta la decisión de sus familiares.

Explicó Del Rosario, que están haciendo turnos de 12 horas, por lo que, muchas veces, cuando sale de su casa, sus dos hijos están durmiendo. Cuando va de regreso, ella les avisa, por lo que ya saben que no pueden salir a recibirla o estar en el área por donde va a pasar, hasta que no haya cumplido con los protocolos de bioseguridad, indistintamente del método de desinfección que utilizan, una vez llegan a la base luego de atender a los pacientes.

La paramédica Nuria Ortiz, también del DENGEDTP de Coclé, con 9 años de servicio en la CSS. Tiene un niño pequeño a quien dedica su tiempo libre. El que pueda tener, porque asegura que con su trabajo es bien difícil; y más ahora con la covid-19, ya que tiene que hacer la rutina de limpieza en la base, y al llegar a la casa volver a hacerse la desinfección para poder estar con su hijo.

“Desde que entré, la verdad me he sentido bien, porque es algo que me gusta desde que empecé a estudiar, no he sentido que me hayan discriminado por ser mujer, trabajamos igual, hombro a hombro”, explicó Nuria; quien señaló, además, que en el ámbito personal sí ha sido un poco difícil, ya que el tiempo que le puede dedicar a la familia no es como el de las mujeres que tienen otro tipo de trabajo.

Nuria narró, que al inicio de la pandemia por la covid-19, atendió a una paciente positiva sin saberlo, por lo que pasó 14 días en cuarentena; estuvo en casa con miedo, puesto que la noche anterior la paso con su hijo y esposo, por lo que temió haberlos contagiado.

Los accidentes con personas atrapadas, víctimas fatales, tanto jóvenes como niños, son situaciones que enfrenta como paramédica. Sabe que todos los días hay retos muy grandes, porque trabajar con personas te obliga a esforzarte, porque las personas tienen sentimientos y los errores cuestan caro, dijo Ortiz.

La paramédica envía un mensaje a las jóvenes que aún no saben qué carrera estudiar, y tienen vocación de ayudar a los demás, para que tomen en cuenta la de Técnico en Urgencias Médicas.

El hecho de ayudar, y la satisfacción de ver esa confianza que tiene el paciente cuando se les habla, cuando algunos están al borde de la desesperación, y les das esa tranquilidad es lo más satisfactorio. Además, comenta Nuria que algunas personas los saludan en la calle, y contestan sin saber quiénes son; pero estas personas sí se acuerdan de que fueron ellos los paramédicos que los atendieron en algún momento.

Para el licenciado Jorge Rodríguez, encargado de la oficina de la DENGEDTP de Coclé, trabajar con sus compañeras ha forjado una gran confianza y amistad.

“Al trabajar en la parte prehospitalaria, porque son mujeres no quiere decir que no puedan hacer el trabajo de un técnico en Urgencias Médicas, ellas al igual que un hombre, trabajan y hacen lo mismo en el campo laboral, con ciertas limitaciones físicas, porque a veces hay que cargar pacientes, por el peso, pero igual ellas no se rinden” comentó el paramédico.

En cualquier situación que se presente, las paramédicas del DENGEDTP están capacitadas, recalcó el licenciado Rodríguez; y fue enfático al señalar que las compañeras tienen las mismas capacitaciones que el resto del equipo.

También, tienen todo el apoyo que se les puede ofrecer, por parte de los compañeros varones, señaló Rodríguez.

Nota de prensa: Emileth Bosquez