Ganglios y su presencia en el cuerpo de los infantes
Los ganglio linfáticos son estructuras redondeadas del sistema inmune (sistema de defensa del cuerpo) que realizan múltiples funciones, como filtrado de la linfa que circula por los vasos linfáticos, atrapan gérmenes de todo tipo y contienen muchos linfocitos (celulas blancas), por ende ayuda a las defensas que debe desarrollar un infante.
Sin embargo, todo esto ocurre con la maduración del sistema inmune, y la lucha contra todo tipo de enfermedades, en especial las infecciosas; explicó el doctor Anthony Thomas, médico pediatra de la Policlínica “Don Alejandro de Guardia, Hijo”, ubicada en Bethania.
Estos ganglios están distribuidos por todo el cuerpo, y los principales están ubicados en el cuello, axilas, tórax, rodillas, codos, abdomen e ingle; pueden ser superficiales (se pueden palpar) o profundos (dentro del cuerpo es imposible de palpar).
A todas las edades es normal tener nódulos, los mismos no deben doler ni aumentar de tamaño, otra característica es que su consistencia es blanda, la presencia en un lado del cuerpo debe acompañarse de ganglios similares en el lado contralateral, indicó Thomas.
Hay signos que no deben presentar los ganglios, como el aumento de tamaño, dolor al ser palpados, endurecerse, irregularidad en su forma y la superficie de la piel no debe tener signos de inflamación (no tener color rojo ni tener el área caliente).
Según Thomas, de acuerdo al lugar en donde se encuentren ubicados los ganglios, se podrá determinar qué tipo de enfermedad tiene el infante, por ejemplo: si la infección está en el cuero cabelludo los ganglio se presentarán en el cuello, pero si la infección la tienen en los dedos, los ganglios se presentaran en codo o axila en el mismo lado de la afectación.
Si se presentan nódulos inflamados (adenitis, adenomegalia) en varios lugares del cuerpo del infante al mismo tiempo, es importante dirigirse al pediatra, para su respectiva evaluación y descartar cuadros sistémicos, como infecciosos virales, o enfermedades de tipo maligno, como leucemia y linfomas.
El doctor Thomas concluyó con que la madre del infante debe estar muy pendiente de los cambio de de su hijo, porque el aumento de tamaño o síntomas relacionados con ganglios, deben ser evaluados de forma integral, aunque destacó que la gran mayoría de las consultas por esta patología en el área de pediatría, se trata de situaciones normales o fisiológicas.
Nota / Fotos: Giovanna Rodríguez Cáceres