Proceso para cirugías en el HEPOTH

Para realizar una cirugía se deben llevar a cabo una serie de procedimientos prequirúrgicos, paso a paso y de manera cautelosa, sobre todo tratándose de niños.

Hay dos tipos de cirugías, dependiendo de la naturaleza del caso: las de emergencia, las cuales entran por el cuarto de urgencias, referidas por policlínicas o de otro hospital, y las programadas; explicó el doctor Renán Araúz Cubilla, cirujano del Hospital de Especialidades Pediátricas “Omar Torrijos Herrera”, de la Caja de Seguro Social (CSS).

Las cirugías de emergencia, regularmente entran por el cuarto de urgencias, cuando llegan se presentan por medio telefónico al médico o paramédicos presentes en la unidad.

El paciente es evaluado por el pediatra, quien luego manda a realizar las pruebas que pueda necesitar, ya sean de gabinete o tomografías, y los medicamentos que se puedan pasar vía intravenosa. 

Según la especialidad requerida, él hace una llama a los colegas cirujanos; estos hacen una segunda evaluación, determinando la premura con la que debe entrar el paciente al salón de operaciones, o si más bien podría estabilizarse y luego pasar a sala de operaciones. ​

Todo este procedimiento se debe realizar de la manera más expedita, cautelosa y consensuada posible, hay que recordar que se trata de niños, por lo que se deben tener claros los conceptos de urgencias, emergencias relativas y emergencias eminentes, de lo contrario se puede poner en riesgo la vida del infante

RENÁN ARAÚZ CUBILLA, CIRUJANO

Araúz dijo que en su especialidad, la ortopedia, la mayor parte de las emergencias son relativas, porque no se pone en peligro la vida del niño, la mayoría de las veces; en cambio, en la cirugía pediátrica de apendicitis aguda, si no se hace el manejo quirúrgico correcto, pueden tener complicaciones muy serias y se expone la vida del paciente.

Una vez que se determina la necesidad quirúrgica, la respuesta se dará entonces en el salón de operaciones; el especialista quirúrgico que fue consultado avisa por medio de una boleta, y el paciente pasa a la siguiente fase, en la que anestesiología pediátrica revisa todas las condiciones previas del paciente, y en conjunto con el cirujano deciden el manejo que recibirá en el salón de operaciones.

También están las cirugías programadas, estas son las que se presentan por determinadas condiciones, en las que no pone en peligro la vida del infante, pero aun así el paciente necesita la intervención para mejorar su calidad de vida o prevenir una alteración a largo plazo, que le impida caminar o que la columna no está bien o algún órgano no funcione correctamente, estas son el tipo de condiciones que se harían como cirugías electivas, indicó  Araúz.

Para este tipo de procedimiento se debe estudiar al paciente antes de la cirugía. Es referido a las diferentes especialidades que sean necesarias, ya sea por un problema de corazón, respiratorio o digestivo, y todos se ponen de acuerdo con evaluaciones para definir si el paciente puede o no puede ser intervenido. 

Arauz dijo que si un paciente estuviera programado para una operación, por cualquier enfermedad, todos tienen que ser compensados por todos los especialistas antes de ingresar al quirófano, y luego que entra todos los que intervienen deben estar preparados por posibles circunstancias que se puedan presentar.

«Allí es donde todos debemos estar conscientes de que estas cirugías no se pueden improvisar -enfatizó, Arauz- en donde deben estar preparados para que los familiares donen sangre, así sea que el procedimiento sea muy pequeño las cosas en un quirófano en ocasiones son imprevistas, se complican y se necesita sangre».

Cuando el paciente programado entra al quirófano y requiere de algún medicamento especial, en el hospital están preparados, si se necesita mantenerlo en cuidados intensivos, el hospital también está listo para ello, tiene el espacio necesario; por eso se explica que son dos corrientes distintas, y el HEPOTH siempre está listo para estas circunstancias.

Luego de que se da la respuesta quirúrgica, según lo que se necesite, se puede demorar de 15 a 20 minutos, como también se dan las que pueden extenderse entre 4 y 5 horas.

Antes de la pandemia se le daba respuesta a la población infantil con 300 o 400 cirugías por mes, debido la COVID-19 existe una mora quirúrgica de aproximadamente mil pacientes, resultando bastante elevada, esto es efecto de la pandemia.

A partir del mes de abril el HEPOTH se organizó para poner al día la mora quirúrgica, el doctor Arauz realizó 18 cirugías clasificadas entre reducciones abiertas, reducciones   cerradas y alargamientos.

Nota: Giovanna Rodríguez Cáceres