Importancia de atender la audición

«En todas las actividades que realizamos en la vida diaria utilizamos el sentido de la audición (oído), por ello la necesidad de brindarle el cuidado y atención oportuna ante algún malestar que se presente», señaló la Lcda. Natalia Escobar, fonoaudióloga de la Policlínica “Manuel de Jesús Rojas”, de la Caja de Seguro Social (CSS) en Coclé.

La pérdida auditiva es una condición discapacitante que puede deberse a diferentes causas, como la genética, complicaciones en el parto, ciertas enfermedades infecciosas (otitis crónica), la exposición constante a sonidos fuertes, el uso de medicamentos ototóxicos y el envejecimiento, recalcó la fonoaudióloga.

Añadió Escobar que, según información de la Organización Mundial de la Salud, se estima que para el año 2030, unos 164 millones de personas en todo el mundo tendrán una pérdida auditiva, siendo esta una alerta ya que no existen los recursos tecnológicos para abordar la situación; al perder la audición se limita el acceso a la educación, al empleo y a la comunicación; además, el personal de intervención que atiende estos casos es limitado.

Gran parte de los niños, adolescentes y jóvenes corren el riesgo de padecer una pérdida auditiva por el uso nocivo de aparatos personal es de audio, como los audífonos para los teléfonos, exposición a ruidos en lugares de recreación (clubes, actividades deportivas) lo que repercute de forma negativa en la audición.

Existen algunas situaciones que pueden indicar que un niño o una persona están perdiendo la audición, un niño con retraso en el desarrollo del lenguaje puede ser por pérdida auditiva.

Una persona que no escucha bien, que necesita escuchar las cosas muy altas, que tiene la necesidad de que le repitan las cosas, zumbidos en el oído, episodios de vértigo, dificultad para escuchar en ambientes con ruidos, o que está expuesta a ruido laboral sin protección o que toma medicamentos que pueden ser tóxicos para el oído, también puede presentar pérdida auditiva.

Las pruebas auditivas se ordenan desde que nacen los bebés hasta personas adultas, ya que estas son importantes para dar una intervención temprana. A los jóvenes se les recomienda estar atentos a los niveles seguros de exposición al ruido, verificar las advertencias que dice que está superando los niveles de volumen recomendados, cuando escuchen música.

La fonoaudióloga recomienda utilizar los audífonos de casco, estos cubren y reducen el ruido ambiente y se ajustan mejor no se ponen tan alto porque no pasa tanto ruido ambiente a diferencia de los que son intracanales.

Entre las recomendaciones que da la licenciada Escobar, están:

  • Si trabaja en ambientes ruidosos, participar del programa de conservación auditiva.
  • Usar los equipos de seguridad auditiva que brinda la empresa.
  • Examen de audiometría una vez al año.
  • Después de exposición al ruido, tome un tiempo de descanso.
  • Se les debe realizar una audiometría a los niños​ antes de entrar a la escuela.

La pérdida auditiva es una condición que puede ser prevenible.

Nota de prensa y fotos: Bolivia Ríos

Foto: Armando Acevedo