Apnea del sueño, condición que puede cambiarle la vida

Posiblemente usted considere que roncar, despertar con la sensación de no haber dormido, estar cansado a lo largo del día o dormirse en cualquier sitio a todas horas, no sea motivo de preocupación, pero sí, debe prestar atención ante estos síntomas ya que puede estar padeciendo de apnea del sueño.

Apnea en griego es, sin aliento, y de acuerdo a la Dra. Verónica Wharton, médica general en la Unidad Local de Atención Primaria en Salud (Ulaps), Sra. Lastenia Canto Solís, ubicada en el distrito de Capira, la AS es el cese de la respiración, la persona no respira por algunos minutos y al no respirar el organismo como mecanismo de defensa se activa (generalmente al sistema nervioso), provocando que este despierte durante toda la noche generando que el paciente no logre conciliar el sueño impidiéndole el descanso.

Menciona que la prevalencia se da en mayor medida en personas con problemas de obesidad  y enfermedades crónicas,  “por ejemplo: en el paciente obeso al acostarse ve oprimidos los órganos por su peso corporal interno, este peso cae sobre sus pulmones impidiendo que entre el aire con normalidad, entonces, al no poder dormir, no poder tener el descanso como fisiológicamente corresponde, la persona no desempeña satisfactoriamente sus actividades y vive agotado”.

Por otro lado apunta que órganos como el cerebro, corazón, riñones, etc., corren el riesgo de no recibir el oxígeno necesario para ejercer sus funciones.

Dormir, trastoca la vida

Una persona con apnea del sueño como Maziel M, ha visto su vida complicada como consecuencia de este padecimiento,  desde los 9 años (actualmente tiene 23), comenzó a dormirse mientras conversaba, de camino al colegio, en las clases, su vida social ha estado siempre inmersa en “dormirse en todos lados”.

Señala que en su vida de estudiante sus padres acudían constantemente al colegio ya que al no poder evitar adormecerse provocaba la molestia de los docentes quienes veían en esto una falta de respeto pues su actitud demostraba “desinterés”, según ellos.

“No podía hacer mucho, vivía frustrada, si salía de paseo con la familia y  los amigos tenían que hacerme un espacio a donde fuéramos para  que me recostara y pudiera descansar por algunos minutos, esa situación fue una constante en mi vida por muchos años, afectó mi autoestima, mi rutina familiar, social, escolar, hasta que mis padres decidieron  hace 11 años,  buscarme ayuda, donde después de varios estudios fui diagnosticada y recetada con el aparato oral parecido a un retenedor bucal usado en ortodoncia”.

El paciente con AS, tiene un ronquido áspero, da la impresión de estar asfixiándose cuando inhala nuevamente luego del  cese de la respiración, amanece con dolores de cabeza, se mantiene somnoliento todo el día, está malhumorado, no logra concentrarse, indicó la galena.

Añade que estos pacientes son remitidos al especialista que practica los exámenes que determinarán si la persona tiene la condición para recibir tratamiento, de todos modos siempre se aconseja al afectado a realizar cambios en su postura, bajar de peso, vigilar y controlar las enfermedades crónicas si las padece.

Nota de prensa y foto: Edda Nereira