Francisco Jaén recibe una nueva oportunidad de vida en Ciudad de la Salud
Después de un extraño dolor en el pecho y que la respiración se le fue acortando, Francisco Ariel Jaén, preocupado por esta situación, fue llevado por su hija al hospital más cercano de su residencia en Panamá Oeste en donde fue estabilizado, tras un infarto que sufrió en horas de la noche en su hogar.
Debido a esta situación, fue trasladado a la Ciudad de la Salud. “Cuando llegué al monstruo de la Ciudad de la Salud, me hicieron un cateterismo, y me dijeron: no hay otra salvación que operarte. Me tuvieron que cambiar cuatro venas”, relató.
Explicó que le sacaron venas de su mano izquierda, el brazo y muslo. Sonriente manifestó que se siente en muy buenas condiciones.
Tras el infarto, fue operado a corazón abierto en el Instituto Cardiovascular y Torácico. Al momento del recobro estaba consciente de que le habían hecho una cirugía. “Llegó una persona conocida que me preguntó cómo te sientes y yo le conteste: sé que estoy operado, me siento tranquilo”, recordó.
Te puede interesar: Más de 500 cirugías se realizan en el Instituto Cardiovascular y Torácico
Resaltó que la atención y los médicos son muy buenas. Afirmó que no tiene queja porque es un hospital de primera. “Para mí fue un muy buen trato y bien atendido”.
Ahora con esta experiencia, destacó que la Caja de Seguro Social es una gran ventaja. “En una clínica privada jamás hubiera podido pagar tanto dinero”, enfatizó.
Notas Relacionadas
- Toxina botulínica (Botox) es usada en padecimientos neurológicos
- Espina bífida es prevenible, consumo de ácido fólico es vital
- Ciudad de la Salud desarrolla el estudio genético del cáncer hereditario
- Conozca los signos de la escabiosis o sarna
Añadió que se siente muy bien después de la operación. “Me siento agradecido con Dios por esta nueva oportunidad de vida”.
Mientras que su esposa, Herlinda Magallón de Jaén, contó que para ella fueron momentos de mucha angustia, ya que cuando lo llevaron al hospital, él le pedía a Dios otra oportunidad.
“Cuando me llama la hermana y me dice que lo van a operar de corazón abierto, yo lloré. Ariel no va aguantar esto, se lo encomendé a Santa Librada y a Dios”, subrayó.
Destacó que hasta ahora todo ha salido bien. “Una buena atención en la Ciudad de la Salud, no hay queja de nada, y exhorto a que hay que cuidar mucho estas instalaciones, porque son muy importantes para los pacientes cardiovasculares”.
Nota: Tharyn Jiménez V.
Fotos/ Video: Melvin Zeballos.