Clínica de Heridas de la policlínica de Betania, al servicio de la población
En la Policlínica “Don Alejandro De La Guardia, Hijo” se atienden aproximadamente 30 pacientes en el turno de la mañana, y en horas de la tarde de 15 a 20 asegurados diariamente, informó la doctora Yamileth González, jefa del servicio de Clínica de Heridas de esta instalación de la Caja de Seguro Social (CSS), ubicada en el corregimiento de Betania.
La Clínica de Heridas contribuye a disminuir los días de hospitalización del paciente.
Las lesiones que se atienten con mayor frecuencia son las úlceras venosas, son heridas que se forman en miembros inferiores, de las rodillas hacia abajo, en cualquier parte de la pierna, las áreas más vulnerables son los talones o cualquier parte del tobillo, la parte anterior de la pierna, hasta el dorso del pie, son heridas muy dolorosas.
González explicó que este tipo de patología, son consecuencia de la insuficiencia venosa, esto se traduce en que la sangre no logra circular adecuadamente porque las venas han perdido su elasticidad y no se envía la sangre suficiente, la misma baja, pero no tiene un adecuado flujo de retorno.
Vale destacar que la mayoría son úlceras venosas, las venas se van engrosando, o dilatando y pierden la capacidad de bombear la sangre, lo que contribuye a una mala circulación, que determina la aparición de úlceras, estas heridas son bastante difíciles de cerrar y tienen la característica de ser reincidentes, el paciente tiende a regresar al año o año y medio para requerir una nueva atención.
Hay pacientes muy disciplinados y que tienen un adecuado control de su medicación y cuidado de la piel para no recaer frecuentemente, de igual forma vuelven a ingresar a la clínica, de requerirlo así.
En orden de incidencia le siguen las heridas de los diabéticos, más que todo pie diabético, el rango de edad va de 25 a 90 años, no hay distingo de ningún tipo.
“En la Clínica de Heridas se atienden diabéticos extremadamente jóvenes desde 18 y 20 años, diabéticos juveniles mal cuidados, descompensados; las heridas más frecuentes aparecen del tobillo hacia abajo, como es la tendencia”, resaltó´.
Aprovechó para hacerle un llamado a la juventud, para que tomen conciencia del cuidado que deben tener con su salud, ya que el ser jóvenes, no es sinónimo de inmortalidad.
Generalmente las lesiones son producidas por presión ya que al diabético se le va deformando el pie, el mismo hace callosidades y debajo de esos callos siempre hay una úlcera, la mayoría de las veces es bastante profunda, o de pronto con el zapato se hacen una ampolla pequeña, y por esa mínima herida el dedo se necrosa y en algunas ocasiones por ese pequeño descuido hay que dirigir al paciente a la sala de operaciones y operar.
En esta clínica llega todo tipo de casos, manifestó la Dra. González, por ejemplo, si a un paciente le han amputado alguna parte del cuerpo permanece en el hospital de 24 a 48 horas en observación, de no presentar inconveniente se le da la salida, pero con la salvedad que debe dirigirse a la Clínica de Heridas para continuar con su curación y tratamiento.
También se atienden desde cesáreas infectadas, dehiscencia de heridas complicadas, pueden ser que una herida muy amplia como una laparotomía; todas estas personas llegan a la clínica referidos para el cierre total.
También están incluidas las laceraciones oncológicas, que son atendidas en esta instalación, todo esto con el fin de evitar la estadía del paciente en un hospital, que en muchas ocasiones resulta ser muy abrumadora, finalizó la doctora González.
Nota / Fotos: Giovanna Rodríguez Cáceres