Proceso de desarrollo a través de la estimulación en el niño

Los primeros años de vida de un niño son muy importantes para su desarrollo. Es crucial que los niños vivan en un hogar donde haya amor y cuidados, y que la familia pase tiempo jugando, cantando, leyendo o conversando.

Las habilidades como dar el primer paso, sonreír por primera vez y decir adiós con la mano se denomina items del desarrollo.

Las actividades que realizan los niños desde los 0 meses hasta los 9 meses de edad, es lo que nos indicará si el infante va acorde a su evolución.

Por lo que, la Lcda. Karina Paredes supervisora de Estimulación Temprana del Hospital “Irma de Lourdes Tzanetatos”, señala que:” para cada etapa el neonato tiene que desarrollar áreas de crecimiento físico, desarrollo cognitivo, desarrollo afectivo y social, desarrollo del lenguaje y desarrollo sensorial y motor.

Aun cuando el crecimiento es un proceso natural y normal, no es algo que se dé de manera exacta en todas las edades, ya que cada niño tiene su propio ritmo.  

0 a 3 meses

  • Postura boca arriba subir y bajar las piernas del bebé de manera paralela, para hacer movilizaciones.
  • Los brazos abrirlos y luego cerrarlos como si estuviera abrazándose a él mismo.
  • En posición boca abajo y con supervisión,  permita que el bebé eleve la cabeza para fortalecimiento.
  • Tomar sus manitas y mover los dedos con movimientos circulares uno por uno.
  • Colocarlo boca arriba y mostrarle un juguete para que trate de agarrar con ambas manos.
  • Leerle cuentos
  • El amamantar a su bebé ayuda a promover un mejor desarrollo del lenguaje
  • Con un objeto negro o rojo, estimular el seguimiento visual, colocándolo a 20 cm de distancia y hacer leves movimientos, el niño tiene que girar su cabeza.
  • Agite un objeto sonoro (el bebé no debe verlo), se coloca en cada lado del oído y el buscará la fuente del sonido.
  • Cantarles canciones estimula el sentido de la audición.
  • Los masajes favorecen el vínculo afectivo.
  • Al momento de vestirlo acaricie con texturas y aprovechar el contacto de la piel.
  • Baile con su hijo y exprésele los sentimientos
  • Colocarlo frente a un espejo.
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3 a 6 meses de edad

La Lcda. Gloribel Pérez, destaca que la estimulación temprana de los niños es más eficaz porque su cerebro tiene mayor plasticidad; esto hace que se establezcan conexiones entre las neuronas con más facilidad, rapidez y eficacia.

Las deficiencias o falta de estimulación en el primer año de vida del bebé pueden tener consecuencias en el desarrollo óptimo de sus habilidades motoras, cognitivas, lingüísticas y sociales.

3 meses

  • Desde la posición boca arriba gira hacia la posición boca abajo.
  • Acostado sobre su vientre, es capaz de sostenerse sobre sus codos y alzar la cabeza y hombros.
  • Extiende su mano abierta en dirección a un objeto deseado.
  • Gira su cabeza en dirección a ruidos y voces humanas.
  • Su capacidad visual se asemeja a la del adulto.
  • Ríe en voz alta. Si le sonríen reacciona con una sonrisa, conducta que no muestra ante objetos.
  • Emite sonidos más articulados, balbuceo en respuesta a voces.

4 meses

  • Se sienta con apoyo sin embargo la musculatura que reviste la cavidad torácica esta aun en desarrollo lo que tiene posición trípode.
  • Realiza agarre en línea media extendiendo los codos.
  • Su atención aumenta es capaz de observar por largo rato sus manos.
  • Disfruta cada acción y sonríe, signo de que está a gusto con el mundo.
  • Conversa a manera de interacción social, emitiendo sonido e imitando gestos faciales.

5 meses

  • Intenta arrastrarse al apoyarse en sus manos.
  • Inicia la trasferencia de objeto de una mano a la otra.
  • Su mano abierta adopta forma dimensión objeto que desea alcanzar.
  • Presta atención si alguien lo llama por su nombre.
  • Realiza variaciones en el tono y volumen de su voz.

6 a 9 meses de edad

De acuerdo  a la Lcda. Noemi Mendoza, llegando a los 6 meses, por lo general, el bebé ya debe mantenerse sentado por más tiempo, además mantener la cabeza erguida y un buen control del tronco o cuerpo. Y debe haber adquirido el volteo de boca abajo a boca arriba y viceversa, el arrastre como los soldados es su manera de trasladarse por toda la casa.

6 meses a 7 meses

  • Se mantiene sentado sin apoyo por más tiempo.
  • Empieza con los reflejos laterales.
  • Ya se voltea para ambos lados (de boca arriba y viceversa).
  • A los 7 meses podemos iniciar el entrenamiento del gateo en 4 puntos.
  • Tu bebé ya coge objetos. Los mira una y otra vez  y se los  lleva a la boca.
  • Hace transferencia del objeto de una mano a otra.
  • Los debe chocar, tirar.
  • Incluso puede coger dos cosas a la vez, una en cada mano, o usar el pulgar e índice como pinza agarrando objetos pequeños.
  • Sostiene el biberón con las dos manos.
  • Une varias vocales cuando balbucea (a, e, o) y les gusta conversar con los familiares.
  • Reacciona cuando se le llama por su nombre.
  • Emite sonidos para demostrar alegría o descontento.
  • Ya comienza a emitir sonidos de consonantes.
  • A los 7 meses ya puede iniciar el silábico (ma-má, Pa-pá, te-te, ta-ta)
  • Observa todo a su alrededor cuando está en lugares nuevos y trata de agarrar las cosas que están fuera de su alcance.
  • Se lleva las cosas a la boca.
  • Es capaz de buscar objetos escondidos al frente de él o que estén fuera de su alcance.
  • Reacciona cuando se le llama por su nombre y se le dice “no”.
  • Reconoce a los familiares.
  • Se ríe a carcajada.
  • Da los brazos.
  • Le gusta jugar con los familiares.
  • Le gusta mirarse en el espejo.
  • Su visión ya está más madura a distancia.
  • Mejora su capacidad de seguir con la vista los objetos o personas en movimiento.

8 meses a 9 meses

  • Ya presenta el reflejo paracaídas, colocando las manos al frente cuando siente que se va caer.
  • Empieza el gateo o ya gatea.
  • Se sienta solo.
  • Se para con apoyo y camina agarrado.
  • Golpea objetos entre sí.
  • Agarra objetos entre la punta del pulgar y el índice.
  • Puede comer solo con los dedos.
  • Lanza o sacude objetos.
  • Hace adiós, hola y tortita con la mano.
  • Suelta un objeto para agarrar otro.
  • Ya puede decir monosílabos (ma-má, pa-pá, ta-ta, da-da).
  • Es posible que ya diga “mamá o “papá”.
  • Sacude la cabeza para decir “NO”.
  • Responde a órdenes sencillas.
  • Responde a su nombre.
  • Busca los objetos escondidos.
  • Puede sentir miedo si lo dejan solo.
  • Juega a esconderse.
  • Reacciona cuando se le dice “NO” (interrumpe lo que está haciendo).
  • Reacciona a extraño.

Nota / Foto: Zoraida Sánchez